11/4/2012

Vinoterapia: propiedades y beneficios de la uva

En los balnearios y spas (spa: acrónimo cuyo significado viene a ser salud por el agua y cuya etimología toma su origen de la ciudad balneario belga de Spa) se utilizan todo tipo de tratamientos conocidos como "vinoterapia" desde mascarillas tonificantes, pasando por masajes relajantes, baños de barro, algas, etcétera. De ahí, que el mundo de la cosmética haya aprovechado los demostrados beneficios de la uva en el organismo para sacar al mercado diversos productos cosméticos en los que este fruto de la vid es el principal componente. Cremas, anti celulíticos, aceites, geles y otros productos del cuidado corporal que te acercan el mundo de la vinoterapia a nuestra vida diaria urbana.


En realidad el uso de derivados de la uva como tratamiento para la piel y el cuerpo humano tiene su origen hace muchos siglos, incluso milenios. Desde la civilización romana y, posteriormente, en la Edad Medida, ya se conocían y perfeccionaron sus beneficios, pues se aplicaban mascarillas a base de uvas trituradas, pero no fue hasta 1996 cuando se crearía la primera línea de cosmética basada en la vinoterapia, de la mano de dos vitivinicultores franceses.

La uva tiene un componente que es la base de estos tratamientos: el resveratrol. Se trata de un compuesto de la familia de los polifenoles (grupo de sustancias químicas subdivididas en taninos y flavonoides que se encuentran en el vino), presente en las uvas y que se ha revelado como un magnífico antioxidante. Según diversas investigaciones es 50 veces más potente que la vitamina E y 30 veces más que la vitamina C.
Este compuesto, que está presente sobre todo en la piel y las pepitas de las uvas lo fabrican de cara a protegerse de posibles infecciones y radicales libre que puedan dañarlas. También se encuentra en otros frutos, como las granadas o los arándanos. Los polifenoles previenen el envejecimiento de la piel, la reafirman e hidratan, estimulando la generación de colágeno y favoreciendo igualmente la tonificación muscular. El resveratrol, además, es un activador natural en la producción de sirtuinas, unas enzimas que siempre han estado asociadas con la longevidad de los seres humanos.