15 de Julio 2015

El paisaje del vino de La Rioja como “Bien de Interés Cultural”

Segunda parte

 

Del conjunto de elementos patrimoniales, materiales e inmateriales, como elementos que pueden ser propiamente constitutivos del paisaje o circunstanciales al mismo, se encuentra un paisaje evolutivo y dinámico en el que los elementos más actuales conviven con los procedentes de épocas pretéritas.
Entre los elementos más destacables de cultura material se encuentran los siguientes:
Los lagares rupestres. Se trata de oquedades talladas sobre la propia roca que fueron utilizados para el prensado de la uva, bien pisando la misma o bien mediante la instalación de prensas. Algunos de estos lagares se encuentran aislados y otros forman verdaderos espacios conjuntos de ellos, constando de dos espacios: uno, ligeramente rebajado, que hacía las veces de depósito para la uva y otro, contiguo al primero, habilitado para la recogida del mosto.
Los guardaviñas. También denominados chozos, son construcciones rurales situadas en los viñedos cuya finalidad básica consistía en servir de apoyo de las faenas agrícolas y guarda de herramientas y aperos de labranza, así como para guarecerse de los rigores e inclemencias del clima. Estaban construidos en piedra y con cubierta de diferentes materiales.
Las bodegas y los Barrios de bodegas. Las bodegas son construcciones en superficie, subterránea o mixtas cuya función actual, o en su origen, sea la elaboración de vino, su guarda y envejecimiento, y/o conservación. El Gobierno de La Rioja ha incluido, a efectos de la declaración como Bien de Interés Cultural, las bodegas anteriores al año 1950. Los Barrios de Bodegas son conjuntos urbanos conformados en su totalidad o mayoría por bodegas, bien sean los que se encuentren dentro del casco urbano del municipio como los que se sitúen fuera del mismo.
Los barrios de bodegas, por su propia fisionomía y configuración estructural, adquieren la condición de unidades con identidad propia, singular y exclusiva, quedando incluidos en la protección de la trama urbana o periurbana tantos los espacios libres situados entre las construcciones y/o edificaciones existentes sobre los calados (así denominadas las antiguas bodegas subterráneas excavadas bajo el suelo), así como cualquier construcción incluida en su delimitación.
Por otro lado, y respecto a los elementos de cultura inmaterial, se entiende por estos todo un conjunto de saberes, conocimientos y tradiciones relacionados con el cultivo de la vid y la elaboración del vino, la toponimia, el romancero, el cancionero popular, el refranero, así como todas las leyendas y dichos populares transmitidos de generación en generación que hacen referencia al vino. Aquí también se incluyen las técnicas de viticultura, las herramientas y aperos de labranza, los oficios vinculados al vino (herrero, cestero, tonelero….), así como las fiestas populares en las que el vino sea el protagonista principal.