La ayuda a la reestructuración y reconversión de viñedos inició su aplicación en la Unión Europea (UE) en el año 2001, en el marco de la Organización Común de Mercado (OCM) vitivinícola aprobada en 1991. Con posterioridad, también se recogió en la OCM del vino aprobada en 2008 y en la OCM única de 2013, dando subsidiariedad a los Estados miembros para su aplicación dentro de los Programas de Apoyo Nacionales.
España introdujo esta medida en el primer Programa de Apoyo al sector vitivinícola español para el periodo 2009-2013, volviéndose a incluir en el Programa de Apoyo 2014-2018.Cada Estado miembro dispone de un presupuesto fijado por la UE y puede elegir entre un menú de medidas admisibles, para ser aplicarlas a través de Programas de Apoyo Nacionales con una duración de cinco años.
España cuenta con 1.194 millones de euros para el Programa de Apoyo 2014-2018 al sector vitivinícola español. Este presupuesto será destinado a las medidas de promoción de vinos en mercados de terceros países, reestructuración y reconversión de viñedos (incluida la replantación de viñedos por motivos sanitarios o fitosanitarios a partir de 2016), destilación de subproductos, inversiones, innovación (a partir de 2016) y, en caso de desequilibrio de mercado, cosecha en verde (a partir de 2015).
La finalidad de esta ayuda es aumentar la competitividad de los productores vitivinícolas adaptando la producción a la demanda del mercado y reduciendo los costes de cultivo, a través del apoyo a tres actividades: reimplantación del viñedo, reconversión varietal y mejora de las técnicas de gestión del viñedo.
Esta expresamente excluida la renovación normal de los viñedos que hayan llegado al final de su ciclo natural.El objetivo de la ayuda es contribuir a los costes de las operaciones de la reestructuración y reconversión de viñedos y compensar a los viticultores por la pérdida de ingresos derivada de la aplicación de la medida.La contribución de la UE para los costes de reestructuración y reconversión de viñedos no podrá exceder del 50%. Para las regiones menos desarrolladas dicha contribución no podrá superar el 75%.
En el año 2016 se han destinado a esta ayuda 75 millones de euros, de los que el 34% lo han sido en Castilla La Mancha con 25,2 millones, mientras que en Extremadura ha ocupado el 24%, unos 15 millones de euros, el 8% en Castilla y León lo que suponen 6,1 millones de euros y el 7,7% total de la inversión se ha empleado en La Rioja por un valor de 5,7 millones de euros.
Se han beneficiado un total de 19.778 hectáreas, lo que supone un 17% menos que en el año anterior, aunque la reducción monetaria de las inversiones sólo ha sido del 7%. Castilla La Mancha aglutina el 46% del total con 9.040 has, Extremadura el 15,8% del conjunto con 3.126 has, Castilla y León el 7,89% con 1.560 hectáreas y Cataluña el 7,85% con 1.553 has.
La ayuda media por hectárea reestructurada ha sido de 3.792 euros, siendo el valor más alto el de Galicia con 6.791 euros, mientras que, por ejemplo, en Castilla y León ha sido de 3.934 €.En total se han beneficiado de la ayuda 8.070 viticultores, un 16% menos que en 2015. De ellos 2.882 lo han sido en Castilla La Mancha, 1.034 en Cataluña, 1.019 en La Rioja, 863 en Extremadura y 393 en Castilla y León. El 99% lo ha hecho a través de planes colectivos.
En cuanto a las actividades ejecutadas, el 92% se corresponden a reimplantación de viñedo, el 6,8% al cambio de vaso a espaldera y el 0,69% a la reconversión varietal.De las 18.164 hectáreas que se han beneficiado de la reimplantación de viñedo, el 18,2% lo han hecho con variedad "macabeo", el 13,25% a "tempranillo", el 9,96% a "garnacha", el 7,8% a "airén" y el 4,87% a "verdejo".
Fuente: MAPAMA y Agronews Castilla y León